Sientes, padeces, escoges y desechas.
Nunca unos despojos tuvieron tanta vida.
Sabes hacerlo, controlas y cribas pero no peleas, aun corriendo el riesgo de quedarte con las tripas llenas de pus.
Dijeron que esto -llamémoslo secuencia, llámalo vida- consistía en una de cal y otra de arena. Pero la cal está ensangrentada y la arena es polvo.
Y ese maldito reloj que insiste en darme las horas. Más horas para sentir, padecer, escoger y desechar, para filtrar como harina a través del cedazo.
Gif de la xarxa |
(Fragments inspirats en el "Psicoanalista" de John Katzenbach)
Que interesante para procesarlo y extrapolarlo a otras situaciones.
ResponEliminaSaludos
Me alegra que le saques tanto jugo.
EliminaGracias, Guillermo.
Un momento dificil...
ResponElimina...pero necesario.
EliminaMuchas gracias, Charrascona.
no entiendo entiendo me has deleitado
ResponEliminaMe satisface tu deleite, entiendas o no.
EliminaGracias, Recomenzar.
Los despojos nunca deberían tener lugar en la memoria. Puede que con esa arena y tus lagrimas ( ¿estas llorando?) alguien encuentre barro o greda...puede que...
ResponEliminaBeso.
No lloro, ahora. Aunque he llorado y espero llorar bastante o lo suficiente, como para encontrar en las lágrimas, formas veladas del agua.
EliminaBesoh.